Noticias

Un proyecto de investigación muestra el camino a seguir para la energía geotérmica en Dinamarca

Geothermal potential map of Denmark (source: GEUS)
carlos Jorquera 30 Nov 2020

Un grupo de investigadores danés-internacional ha trabajado en un proyecto para optimizar el pronóstico geológico y minimizar el riesgo de perforaciones no exitosas y costosas para el desarrollo geotérmico en Dinamarca.

El subsuelo de Dinamarca tiene un enorme potencial geotérmico sin explotar. Esta es la conclusión del proyecto de investigación Geotherm, recientemente finalizado, que GEUS ha creado en colaboración con socios del mundo de la investigación, la industria y el sector de la calefacción urbana. El proyecto cuenta con el apoyo del Fondo de Innovación. Así lo informó el Servicio Geológico de Dinamarca y Groenlandia (GEUS) en su sitio web la semana pasada.

Poco más del 60% de los hogares daneses se calefaccionan mediante calefacción urbana. Casi la mitad de la calefacción urbana proviene de fuentes de energía no renovables como el carbón y el gas natural. Y solo el 0,1% de la calefacción urbana de fuentes de energía renovable proviene de la geotermia. Sin embargo, esto no se debe a que las condiciones para la energía geotérmica sean malas en Dinamarca, al contrario.

Lars Henrik Nielsen, gerente de proyecto y geólogo estatal del Departamento de Estratigrafía en GEUS, señaló “Sabemos que el subsuelo danés contiene recursos geotérmicos incluso muy grandes, y nuestra evaluación es que una gran proporción de hogares daneses podrán calentarse con energía geotérmica”.

Métodos conocidos de la industria petrolera.

Según Lars Henrik Nielsen, el hecho de que la energía geotérmica no esté muy extendida en Dinamarca se debe a las grandes incertidumbres geológicas, técnicas y económicas asociadas con el establecimiento de una planta geotérmica. Y es esto lo que el proyecto Geotherm ha pretendido remediar.

Lars Henrik Nielse, destacó “Una barrera importante para el establecimiento de una producción geotérmica a gran escala en Dinamarca es la incertidumbre en el pronóstico geológico, es decir, que existe el riesgo de perforar en un lugar donde el subsuelo posteriormente demuestra no ser adecuado como depósito geotérmico. Por lo tanto, un propósito importante del proyecto Geotherm ha sido optimizar el pronóstico geológico y minimizar el riesgo de perforaciones inútiles y costosas”.

Entre otras cosas, los investigadores lo han hecho adoptando y adaptando métodos conocidos de la industria del petróleo y el gas para hacer descripciones detalladas de las capas geológicas y mapear posibles reservorios geotérmicos en el subsuelo.

“Con los resultados del proyecto Geotherm, en el futuro será más fácil evaluar dónde vale la pena buscar el recurso geotérmico, es decir. donde tanto la infraestructura como el tipo de subsuelo adecuado están presentes”.

Informes de mejores prácticas

En relación con el proyecto, se han preparado varios informes de mejores prácticas e informes finales, que presentan los datos y los resultados del proyecto. Los informes contienen, entre otros, recomendaciones sobre cómo obtener la mejor base de datos posible para reducir los riesgos geológicos en proyectos geotérmicos, qué materiales son los más adecuados y cuál es la mejor manera de decidir si un proyecto geotérmico puede ser rentable y debe continuar.

Lars Henrik Nielsen, señala “En GEUS, continuamos nuestros esfuerzos para reducir los riesgos geológicos en estrecha cooperación con otros actores. Esperamos tener la oportunidad de expandir nuestro portal geotérmico con un módulo de cálculo que puede estimar la cantidad de calor que se puede utilizar en una ubicación determinada”.

El proyecto Geotherm cuenta con el apoyo del Fondo de Innovación y está formado por 11 socios:

GEUS, Universidad de Aarhus (AU), FORCE Technology, Geoop, Qeye Labs Aps, Helmholtz – Zentrum Potsdam Deutsches GeoForschungsZentrum (GFZ), Bureau de gecherches geologiques et minieres (BRGM), Lunds Universitet (LU), HGS (c/o HOFOR Fjernvar) así como las dos plantas geotérmicas (de calefacción) en Sønderborg y Thisted.

Fuente: Geus / ThinkGeoEnergy