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Landsvirkjun sigue evaluando la realización del cable submarino entre Islandia y Reino Unido

Planta geotérmica de Hellisheidi (fuente: flickr/thinkgeonergy, creative commons)
Abraham Ormad 27 Nov 2012

La subida de los precios de la electricidad en Europa podrían justificar económicamente la construcción de un cable submarino, por parte de la compañía Landsvirkjun, entre Islandia y Reino Unido.

Landsvirkjun compañía propiedad del estado islandés y que procesa el 75% de toda la electricidad del país se está centrando en proyectos renovables con un alto grado de eficiencia energética. Debido a unos bajos costes de producción se han establecido varias compañías extranjeras y el futuro no puede ser más prometedor.

La empresa sigue evaluando la posibilidad de desarrollar un proyecto que una Islandia y Gran Bretaña mediante un cable submarino. Dicho cable apoyaría los principales pilares de la política de la empresa y reduciría significativamente el riesgo en la producción de energía de Islandia.

Para leer el resto de la noticia en este enlace.

Adjuntamos la información que aporta Landsvirkjun respecto al proyecto.

La primera propuesta para conectar las redes eléctricas de Islandia y Escocia a través de un cable submarino se introdujo por primera vez hace 60 años. La viabilidad de este proyecto ha sido evaluada con regularidad durante los últimos 30 años. El resultado de esta investigación demostró que un proyecto de estas características sería técnicamente posible, pero no sería rentable para una empresa.

 

Foto tomada de la web de Landsvirkjun

Una nueva investigación llevada a cabo por Landsvirkjun, en colaboración con Landsnet, entre 2009 y 2010 arrojó luz sobre el potencial de este proyecto, que podría de hecho ser económicamente viable. La principal justificación de este cambio fue la subida de los precios de la electricidad en Europa y en el aumento de la demanda de fuentes de energía renovables, con emisión nula o baja de gases de efecto invernadero.

Se estima que se necesitará un período de entre cuatro a cinco años para estudiar la viabilidad y los aspectos técnicos/económicos de la interconexión. Siempre y cuando se tomara una decisión positiva sobre el tema, serían necesarios otros cuatro o cinco años para la producción, instalación del cable y la necesaria construcción de otras tareas relacionadas. Como muy pronto, el proyecto podría comenzar a funcionar en 2020 .

Fuente: Landsvirkjun.